Acurrucarse con el ser amado…
Vainilla y Fresa | Cierra los ojos e imagina estar acurrucado con la persona que amas en esta cuarentena. Así de cálido es regresar a la novela favorita.
Vainilla y Fresa | Cierra los ojos e imagina estar acurrucado con la persona que amas en esta cuarentena. Así de cálido es regresar a la novela favorita.
Por Adriana Barba
Monterrey, Nuevo León, 5 de junio de 2020 [01:21 GMT-5] (Neotraba)
Cuando los días parecen más pesados de lo normal y sientes que te falta el aire, juras que el Covid entró a casa por medio de las bolsas reciclables del Walmart y ya estás preparando la cuarentena en tu cueva. Entonces una luz esperanzadora entra en ti, recuerdas que llevas de 68 a 72 días en encierro, no tienes Covid y solamente estás harto de todo.
Son esos días cuando nuestro sentido de supervivencia te lleva al lugar seguro, a donde fuiste feliz, a ese lugar donde tu corazón se sentía explotar, y agradecías haber llegado ahí.
Ese lugar es: Tú novela favorita, a eso le llamo yo: “Acurrucarse con el ser amado, en noche de lluvia”. Cierra los ojos e imagínatelo, ¿a poco no es uno de los momentos más seguros y placenteros de nuestra vida? Así de bonito es regresar a tu novela favorita, la reelectura: esa que te lleva a descubrir cosas entre líneas que se te pasaron en la primera, segunda o tercer leída.
Los últimos días han sido lluviosos en Monterrey y regresé con todo el amor a Loba de Orfa Alarcón editada por Alfaguara en 2019.
Loba es la historia de Lucy hija de un poderoso y temible político que es también un predominante capo del crimen organizado en Nuevo León.
Más allá de enfocarme en los temas tan fuertes que trata la novela como: trata de blancas, narcotráfico, incesto y violencia como toda ñoña enamorada del amor y de las costumbres de rancho que soy, Loba me enganchó por los recuerdos que me trajo de la infancia, lo que escuchaba de mi abuela y de las canciones que cantaba en el rancho.
Y como le comenté a Orfa Alarcón hace meses:
“Estoy segura que todos los regios sentimos que Loba es de nosotros, que son las historias de nuestras familias en Cadereyta, Linares o Doctor González, pude escuchar a mi abuela o a mi bisabuela sentadas en la mecedora tejiendo: ‘La traía bien agarrada, le hizo de todo pero no se la pudo sacar’ y sí, también mi última tía nació como muerta, sin amor de madre”.
Al estar leyendo sientes el corazón estrujado porque sabes igual que la protagonista que su amor no será eterno.
Tan mía sentía la novela que en un capítulo cuando entran a la cantina clarito en mi mente me veía entrando a Pilos Bar, cantina famosa en Guadalupe Nuevo León, con las mesas de Carta Blanca y cantando canciones de Invasores.
Por mucho, Loba forma parte de mis novelas favoritas y Lucy su protagonista se queda conmigo.
Regresar a ella siempre será mi lugar favorito, algo así como: “acurrucarse con el ser amado en noches de lluvia”.