¡Pinche Rafael Bernal! (Parte I)

El Complot Mongol soporta su calidad narrativa en lo humanos que pueden ser los personajes, incluso siendo caricaturas de sus roles. No son nombres en un papel de hechos en un crimen, no son fotografías que revelaremos en un expediente al que le daremos carpetazo. Son personas.

El complot mongol de Rafael Bernal

Barrio Chino

Tiene una forma distinta de la propiedad cultural de ser mexicano, cómo una zona tan pequeña y espectacular resiste a la erosión social.

Barrio Chino. Foto de Óscar Alarcón

Hijos

Si uno espera tener un hijo porque quiere ser mejor educándolo es porque cree que podría mejorar desde lo ya existente, pero aquí se habla de los no hijos.

Foto de Jyotirmoy Gupta a través de Unsplash

Invierno

Una persona sin hogar no es deseada, pero tampoco es como que exista una alternativa para personas que no tienen nada. Porque resulta más sencillo caminar por una calle, ignorando a las personas que llevan encima tres o cuatro chamarras, con los zapatos gastados, los pantalones llenos de polvo. Imagine cuánto podemos rescatar de tratar a un ser humano como lo que es.

Foto de Clay Leconey a través de Unsplash

Hasta aquí

Porque no importa con cuánta furia escriba en estos renglones quietos, el mundo de allá afuera no dejará de tragarse a la humanidad. Me pongo las columnas que he escrito en los pies, y con ellas me dejo ir al fondo. Porque no hay más. Escribo porque no hay de otra, es eso o ahogarme en la normalidad.

Foto de Marcus Hjelm a través de unsplash

Una niebla espesa

A partir de la lectura de un poemario, JJ Jiménez reflexiona sobre cómo la nada, dentro de la identidad, es construido de la nada: se necesita de un referente como la disponibilidad del mundo a ser percibido por el individuo.

Neblina. Foto de Split Shire