Sagradas.

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Por Zaira Eliette Espinosa (@zairaee)

Puebla, México, 13 de septiembre de 2019 (Neotraba)

Hace diez años, Valeria Hipocampo inició a darle forma a su carrera como ilustradora y ahora uno de los frutos de su talento es su libro: Sagradas, 50 diosas de todo el mundo, en el cuál combina el arte de la ilustración con información sobre deidades femeninas de diferentes culturas.

El proyecto de libro nació a partir de la primera ilustración que hizo de Coatlicue, diosa mexica que en náhuatl significa “la que tiene su falda de serpientes” y es la madre de todos los dioses, dadora de vida y muerte. Así nació la propuesta de ampliar a más diosas pues las mitologías siempre le apasionaron.

En palabras de la autora, lo que reafirmó y fortaleció ese proceso de investigación fue: “En términos de ilustración el reto era no perder mi estilo y que no se perdiera la estética de cada una de las culturas que estaba representando, es lo que más me apasionaba de hacer este libro, estéticamente encontrar el equilibrio entre mi estilo como ilustradora y la estética de cada una de las culturas, porque sí tenía bien claro en representar lo que implicaba cada una de las culturas, no quería aplanar el discurso cultural y estético, la carga estética de cada una de las culturas ni mi identidad como ilustradora. En cuanto a la investigación, al texto, me interesaba mostrar que a pesar de que hay una gran diversidad en el tema central que es el ideal femenino, pues es muy parecido entre sí, hay muchos ecos que resuenan entre culturas que están en otro lado del mundo.”

Respecto a los significantes de las diosas y su papel en la vida femenina actual, Hipocampo señala que: “Es muy interesante justo hacer una relectura porque es como revalorar rasgos femeninos que están dejados de lado o que la sociedad no ve tan bien dentro de lo que se considera una “mujer ideal” por ejemplo, hay muchas diosas que reivindican la ira, la muerte, la justicia, que no son rasgos que se tengan como propiamente femeninos creo que la idea de poder identificarte con una diosa y no encontrar esa identificación en ningún otro lado eso ya le da importancia.”

Al final de la búsqueda se llegó a un total aproximado de cien diosas, sin embargo, tuvieron que quedarse algunas fuera: “Nos importaba indagar en diosas que no fueran tan conocidas, escarbar donde no hay tanta información, diosas norteamericanas desconocidas, australianas, polinesias, incluso de aquí mismo por ejemplo hay una diosa maya que es Ixtab, que es la diosa protectora de los suicidas que es totalmente desconocida y pienso que para lo que implica debería ser más conocida. No hay otra cultura que tenga una tenga una diosa de los suicidas y se me hace interesante que esto lo represente una mujer, una diosa y no un dios. Me interesaba rescatar los saberes no tan estudiados”.

El libro Sagradas, 50 diosas de todo el mundo, está muy relacionado con la visión que Valeria Hipocampo tiene al respecto de una definición o apropiación adecuada del término femineidad en la actualidad:

“El concepto femineidad al final creo que solo se ha usado como una especie de corsé que ha oprimido a la mujer en el cual tienes que entrar porque tienes que entrar. Entonces más allá de cuál debería ser ese concepto creo que deberíamos de ponernos a pensar que dentro del ser mujer en esta y en cualquier sociedad debería poder caber todo y creo que en este sentido los mitos de origen de las mujeres, porque al final son mitos donde se refleja el ideal de una mujer dentro de ciertas culturas, nos lo dejan bastante claro, aquí hay todo, muerte, vida, maternidad, no maternidad, fraternidad, hermandad, fertilidad, dentro de todos estos arquetipos puede caber de todo, entonces es lo que me gustaría que dejara un poco mi libro, sobre todo porque esto de las diosas son saberes que en algún momento fue información un tanto prohibida y oculta porque siempre los dioses masculinos, del patriarcado siempre llegaron a suplantar la idea de la gran diosa madre, si revisamos los mitos de origen el origen de la vida es femenino, entonces borrar este saber implica mucho y ya simplemente saberlo te da un panorama más amplio de lo que significa la femineidad a lo largo de toda la historia.”

Las nuevas generaciones no tienen tan cerca los conceptos de las diosas sagradas como en la antigüedad, de manera que se han creado héroes y heroínas con superpoderes que buscan ser referentes de una identidad o cultura, de un mundo forjado de esa raíz materna. Para Hipocampo los superhéroes son mitos modernos reinterpretados y traídos a lo contemporáneo, y también da cuenta de esa necesidad de volver al mito, al origen, si nos ponemos a releer los mitos no hay nada nuevo, son historias que se repiten, se replica la historia del héroe que tiene un viaje que hacer y va en busca de algo, el mito de origen es la historia que siempre se cuenta, por eso es importante ir a la raíz para entender al ser humano.

En un permanente auto reconocimiento, los héroes y las heroínas siempre están en el conflicto de reconocer sus poderes y sus capacidades, sus valores y sus raíces, y al final siempre logran emerger como lo que son. “Y a las diosas no se les ha dado la oportunidad de que emerjan, solo ha habido ensombrecimiento.”

¿Has llegado a considerar crear tus propias diosas? En Valeria Hipocampo se delinea una sonrisa antes de responder: “Sí a lo mejor no diosas, pero sí seres como la mujer ligada a la naturaleza, como una fuerza más grande incluso a ella misma. Pensar en diosas para mí implica una carga ideológica cultural muy grande. Pienso más como en seres no humanos, pero como seres femeninos.

Creo que este proyecto me cayó super bien a lo que yo hago porque siempre he pensado que la humanidad necesita volver al vínculo con la naturaleza, con los ciclos, con algo más grande que nosotros mismos, creo que las diosas lo ejemplifican de manera perfecta, sí son seres humanizados, pero nunca pierden, el reflejo del ser humano, eso sería la idea de la deidad, quien no pierde su vínculo con el origen.”

Entre las diosas que se mencionan en el libro se encuentra Ishtar, de la cultura babilónica; Xilonen de la cultura mexica, diosa del maíz; la diosa Sedna de la cultura inuit, diosa del mar y regente del inframundo inuit.

Sagradas, 50 diosas de todo el mundo, incluye al final de sus páginas ilustraciones de las diosas para recortar con la finalidad de usarlas como estampas, un poco para acercarse también a esa tradición de representar una creencia y traerla consigo. También incluye un listado bibliográfico para aquellas lectoras y lectores que deseen averiguar un poco más al respecto de este trabajo distintivo de las diosas.

Valeria Hipocampo es mexicana, estudió Historia del Arte, trabaja como ilustradora independiente y además es tatuadora muchas veces de sus propias creaciones.

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Sagradas, Valeria Hipocampo. Plan B, 2019