Templos abiertos, museos cerrados y la población en la calle.
A pesar de la recomendación de que los templos se mantengan cerrados pues no están dentro de las actividades esenciales, están abiertos en la CDMX.
A pesar de la recomendación de que los templos se mantengan cerrados pues no están dentro de las actividades esenciales, están abiertos en la CDMX.
Por Pascual Borzelli Iglesias / Óscar Alarcón (@metaoscar)
Todas las fotos son de Pascual Borzelli Iglesias
Ciudad de México, 23 de mayo de 2020 11:25 GMT (Neotraba)
El periodismo en México ha dado la cara para reportar lo que ocurre con la epidemia ocasionada por el nuevo virus COVID-19. El trabajo de los compañeros periodistas que cubren la fuente presidencial, y sobre todo las conferencias de prensa matutinas, y los que reportan desde los hospitales y centros de salud, quizá sea más visible.
Sin embargo, hay otros periodistas que hacen su labor poniendo en riesgo su integridad para retratar la vida cotidiana de la Ciudad de México. En estos recorridos diarios, la ciudad parece que se detuvo. Entre los cientos de establecimientos –que tiene más de 30 días sin abrir– no llama la atención que los museos tengan las puertas cerradas.
Ponemos el acento sobre este hecho no porque en medio de la crisis sanitaria deban de estar abiertos sino porque se contrasta con algunos templos que tienen las puertas abiertas. Eso sí, con cintas que impiden el paso de sus feligreses para que le recen a sus santos con “Su sana distancia”, pero no con las alcancías cubiertas: deposite aquí su limosna.
Según datos de la página del Sistema de Información Cultural (SIC México), en la capital existen 160 museos para los casi 9 millones de habitantes, que antes de la pandemia podían pasearse de martes a domingo.
El Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell –quizá el funcionario del gobierno federal con mayor exposición mediática de los últimos 80 días en el país– informó el 20 de mayo que se registraron 6,090 defunciones en todo el país. Dicha cifra va en aumento e indica que el lavado de manos con jabón, la sana distancia y el confinamiento social deben continuar por lo menos hasta el último día de mayo. Que debían de suspenderse las actividades no esenciales.
Aunque en su mayoría, nuestro país es católico, a las iglesias no se les considera como parte del grupo que realiza actividades esenciales, por lo que debe de mantenerse en aislamiento y confinamiento.
Es importante señalar que desde el principio de la “Etapa 3” de esta epidemia se suspendieron las actividades en museos, teatros, cines e iglesias. Medida anunciada por la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum el pasado 22 de marzo. Tan solo en el Centro Histórico de la Ciudad de México hay más de 40 templos católicos, por lo que no se ve la necesidad de mantener las puertas abiertas de las iglesias.
En este momento es importante mantenerse en casa, guardar la sana distancia y acercarse a los distintos medios profesionales que corroboran y comprueban lo que escriben los periodistas que todos los días ponen en juego su vida. Y si a pesar de ello, usted, como muchos sacerdotes de la grey católica, considera que dios todo lo puede, no es necesario que vaya a la iglesia para dejar su limosna, ya que puede rendir culto a través de distintas plataformas y no vaya a depositar su dinero en los recipientes de las iglesias, que irresponsablemente se mantienen abiertas.
Cualquier excusa se presenta para salir de casa: trabajo, compra de alimentos, sacar a las mascotas, recorrer la ciudad, ver a la pareja o estar con amigos.
El número de muertos en el país aumenta cada día, la Ciudad de México es la entidad federativa más afectada con más de 16 mil casos confirmados y 1,754 defunciones, en promedio, en el país, en la semana mueren 400 por día, ayer murieron 420 personas, 420 familias que perdieron a un ser querido de forma directa: 420 muertes el jueves 21 de mayo del 2020. Es decir, los muertos tienen familia.
Hay más de 330 mil muertos y 5 millones de contagiados activos en el mundo.
Desde que se anunció que ya se ve la luz al final del túnel se percibe más personas y automovilistas en las calles.
No lo olviden: QUÉDATE EN CASA.