Juan Jesús Jiménez estrena una columna y escribe sobre la escuela: Las escuelas entonces se hacen sistemas, muy parecidos a los de una fábrica convencional: se entra y sale a una hora específica, se tiene una hora para comer y las demás son de trabajo, se evalúa el desempeño y se ubican a los deficientes, se les incentiva a mejorar y si no pueden, son expulsados del sistema.