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Por Arturo Morell

Ciudad de México, 22 de mayo de 2021 [GMT-6] (Neotraba)

“Hacía más de diez años que no podía llorar, aunque tuviera un nudo en la garganta o un dolor de esos que te estrangulan el pecho. Finalmente pude hacerlo y sentí un alivio como nunca lo había sentido, prácticamente renací. Me siento muy orgullosa de haber tomado la decisión de inscribirme en el taller creativo “Sanar escribiendo cartas”, donde me llevaron de la mano en este proceso introspectivo de crecimiento y sanación. Gracias Dulce y Arturo por su comprensión y paciencia. Ojalá mi ejemplo sirva a mucha gente para que se anime a darse la oportunidad de sanar a través de la escritura. Atentamente, Lupita.”

Recibir mensajes como este te llena de una enorme satisfacción al poder patentar que, por muy difícil que parezca, todos y todas podemos adentrarnos en el fascinante mundo de la cultura epistolar, sin importar nuestro grado de estudios o profesión.

Para Oscar, otro de nuestros participantes, el taller le permitió conectar de manera muy íntima con sus emociones y recuperar la comunicación con su familia, la cual había perdido años atrás. “Siempre me había parecido ridículo escribir versos y cartas, hasta que me di la oportunidad de hacerlo y descubrí que así puedo comprender mejor mis emociones y canalizarlas. Es muy diferente redactar cualquier documento legal en el trabajo que no implica ninguna carga emotiva”. Su profesión de abogado lo había convertido en una persona fría y calculadora, ocultaba sus emociones para no sentirse vulnerable.

“Me dijo que sí” nos compartió en una sesión Raymundo –un adolescente que se autodefinía como tímido y antisocial– quien se declaró a la chica que le gustaba a través de una de las cartas que aprendió a escribir en el taller. “No me lo creía, ahora no quiero dejar de escribir cartas y preparo la que enviaré al concurso”.

Imagen proporcionada por el autor.

Así podríamos compartir muchas anécdotas más ocurridas en nuestros talleres creativos “Sanar escribiendo cartas”, pero nada mejor que generar tu propia historia a través de aventurarte en algo nuevo como es la escritura. Sin importar la época, grandes personajes de la literatura, la política y el arte, dejaron constancia de sus historias a través de las cartas que se escribieron.

¿Cómo transmitirte la emoción que genera escribir una carta si es indescriptible? ¿Cuántas veces nos enfrentamos a un papel en blanco o nos quedamos pasmados en la pantalla de computadora con un Word o un nuevo e-mail vacío, totalmente vacío, generándonos ansiedad e impotencia? ¿O has intentado escribir un nuevo mensaje de texto por WhatsApp y escribes y borras constantemente porque no sabes cómo expresar lo que sientes por escrito? ¿Cuántas veces has dudado en cómo iniciar una comunicación escrita cuando tus emociones las sientes a flor de piel pero tus ideas están dispersas y se arremolinan en tu mente?

Es muy diferente intentar escribir cuando estás feliz que cuando estás triste o enojado. No saber canalizar tus emociones en lo que escribes puede provocarte un gran problema.

Lupita, Oscar y Jorge nos pidieron que compartiéramos sus experiencias en nuestro taller privado que recién culminó. Como todos, este taller nos dejó muy satisfechos y emocionados por el privilegio de compartir un método que diseñamos e impartimos presencialmente antes de la pandemia, pero que el confinamiento nos hizo trasladarlo al espacio online, permitiéndonos llegar a la intimidad de los espacios de cada participante y juntos explorar los múltiples caminos de las emociones, hacer una introspección y generar el valor de compartir nuestros sentimientos dándoles vida en forma de cartas, muchas cartas… las cartas que sean necesarias.

Imagen proporcionada por el autor.

Tanto para mi querida Dulce Ramón, amiga y cómplice en esta travesía literaria, como para mí, la aventura de rescatar y promover el género epistolar, es un parteaguas en nuestras vidas porque, además de sanar constantemente nuestras propias emociones, nos permitió darle vida a una novela epistolar que bautizamos como ¿Hay carta en tu buzón?. Debió editarse el año pasado pero el paréntesis mundial de la pandemia lo postergó para este año, en breve será publicada por una editorial en Miami, Florida.

Todo lo que ocurre en el universo es perfecto. Los tiempos son perfectos. Hoy nos concentramos en nuestro presente y nos enfocamos en vivir el momento y si, por alguna razón lees estas líneas, es que así debía de ser. Si además algo en ti se movió y te interesó ser parte de nuestro próximo taller creativo “Sanar escribiendo cartas”, es porque estás recibiendo algún mensaje desde tu inconsciente.

Por lo pronto, hoy estamos felices de concluir un taller privado y estar por iniciar uno abierto al público, a todo tipo de público, donde cabemos todos y todas y todes, sin importar nivel escolar, profesión, preferencia sexual o creencia política o religiosa. Lo único que importa es compartir el deseo de aprender herramientas para sanar algo que nos lastima a través de la escritura de cartas o simplemente descubrir y potencializar tu creatividad literaria epistolar.

Estamos agradecidos a las decenas de participantes que han confiado en nosotros y descubierto sus capacidades de auto sanación a través de la escritura y muy orgullosos de quienes decidieron darle continuidad a sus cartas y prometieron que las enviarán al concurso que en breve convocaremos y que culminará en una edición de las ganadoras. Gracias a quienes nos cerraron una puerta porque nos permitió abrir muchas ventanas. Gracias a Neotraba por interesarse y sumarse en esta aventura epistolar y gracias a ti por leer estás líneas y por compartirlas.


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