Los seis dedos que pintó Rafael Sanzio.
Adonai Castañeda escribe su primera colaboración en Neotraba, y nos habla sobre cómo la lectura de Julio Cortázar lo llevó a descubrir los seis dedos en algunos personajes de las pinturas de Rafael Sanzio.
Adonai Castañeda escribe su primera colaboración en Neotraba, y nos habla sobre cómo la lectura de Julio Cortázar lo llevó a descubrir los seis dedos en algunos personajes de las pinturas de Rafael Sanzio.
Por Adonai Castañeda
Me encontraba leyendo Historias de Cronopios y de famas de Julio Cortázar. En específico el capítulo “Instrucciones para entender tres obras famosas”. Una del listado era La Dama del Unicornio.
Pintura de enigmas, a cargo de Rafael Sanzio, llamado también Rafael de Urbino. Nacido el 6 de abril de 1483, falleció el mismo día en 1520. Dato curioso, si tomamos en cuenta que fue un viernes santo. Desde el leitmotiv religioso, legó obras cuya imagen recordamos incluso sin saber el nombre.
A pesar de que mi postura difería con la de Cortázar, estoy seguro de que logró su cometido. Una ola de interés me arrastró, sin importar que el Renacimiento no me interesara en absoluto. Enseguida navegué en la app Google Arts & Culture hasta dar con La Dama del Unicornio.
Después de muchos zooms y varios minutos tratando de imitar una relación obra-espectador, pasé a otras pinturas. Llegué a un detalle que me hizo saltar del asiento. Me asombró La Madonna Sixtina. No fue la composición piramidal, ni que intervinieran seis personajes.
-¡Wow, el papa tiene seis dedos!
Escéptico a mis propios ojos volví a contarlos, una y otra vez.
-Uno, dos, tres, cuatro… uno, dos, tres, cuatro, ¡no puede ser! Uno, dos, tres, cuatro, cinco, ¡seis!
Abandoné dicho trabajo y me dediqué a buscar la misma imagen por doquier. En Google Arts no encontré ninguno además de ése. Botticelli, Miguel Ángel, Donatello, Da Vinci solían colocar detalles sutiles en sus pinturas, había escuchado alguna vez. Símbolos.
Creyéndome necio al googlear “Personajes con seis dedos en obras de Sanzio”, saltó como resultado Los Desposorios de la Virgen. Ahora los seis dedos los poseía San José en el pie izquierdo. Me causó escalofríos que el pie me señalara.
Las preguntas acuden. La polidactilia es un trastorno genético el cual le otorga seis dedos a quien lo padece. Si nos remitimos a prueba, dos figuras de la alta jerarquía religiosa poseían seis dedos en la pintura. Un número que me parecía especial.
Sixtus posee la raíz six: seis. Pensé varios días en cómo meter dicho número a la ecuación.
Autorretrato de Sanzio 1502 Dibujo con tiza negra Oxford The Ashmolean MuseumDi con la descripción de seres con seis dedos. En la Biblia, los nefilim, seres descendientes de ángeles rebeldes y mujeres humanas. Néfilim que significa caído. Los gigantes, conocidos así en la mitología, fueron la causa de sendos desastres. He aquí uno, narrado desde la misma Biblia:
Y hubo guerra otra vez en Gat, donde había un hombre de {gran} estatura que tenía seis dedos en cada mano y seis dedos en cada pie, veinticuatro en total; él también descendía del gigante.
(Samuel 21:20)
El recurso pictórico volvía invisible el detalle en la composición. ¿Será que estas figuras sean como nosotros? ¿Serán menos terrenales? ¿Estarán aquí? Desde ese día veo distinta a la pintura renacentista.