Zacatlán, un pueblito de Europa en México
"Lo haces muy bien como Leonard Cohen. Sonreí y él asintió con la cabeza, luego salí de allí". Una crónica de un encuentro entre músicos, por Aletya Serrano.
Por Aletya Serrano
Puebla, México, 9 de enero de 2024 (Neotraba)
Camino una noche de casi año nuevo debajo de mi abrigo por las calles de Zacatlán de las manzanas y me encuentro con un muchacho joven cantando “Hallelujah” en un portal del zócalo. Su voz no imita a la de Leonard Cohen y se acerca más a la de Nick Cave pero tiene el bagaje físico de Jeff Buckley.
A la gente que va por el corredor no le importa mucho, pero él está ahí frente a ellos dándolo todo, dando su corazón y se nota en el nerviosismo que lucha por controlar y que al final gana haciendo que nos concentremos en su voz.
En mi primer día de clases en la BUAP, en el Colegio de Música de la Escuela de Artes, tuve una clase de solfeo con el profesor Saúl. Éramos 5 mujeres y 45 hombres en el aula. Apenas comenzada la clase, él invitó a pasar a uno de los alumnos al centro a que explicara algo, de inmediato los demás alumnos comenzaron a reírse y a mofarse de su nerviosismo que mostraba con cierta gracia. Entonces, el profesor Saúl se dirigió a todos nosotros diciéndonos: No se burlen, el que está ahí en el centro lo está dando todo. Está dando el corazón, y todos ustedes vinieron para estar ahí.
En Zacatlán me acerque detrás del escenario a esperar que el cantante de “Hallelujah” terminara y con una seña le pedí que se acercara. Le dije casi al oído “Lo haces muy bien como Leonard Cohen. ¿Te gusta Leonard Cohen, cierto? ¿Jeff Buckley?” Sonreí y él asintió con la cabeza, luego salí de allí.
Después pensé en la mala costumbre que tengo de no preguntarle su nombre a nadie pensando siempre que a todos los conozco, y si no es así los volveré a ver porque somos músicos y ya nos encontraremos en el camino. Le hubiera ofrecido mi ayuda que no incluye más que una cerveza derramada de experiencia y amor por la música. También lo pensé después. El frío no me ayuda a reaccionar de inmediato.Seguramente le volveré a ver a juzgar por su talento y su elegante presencia. Me voy de Zacatlán pensando que este no es un pueblo cualquiera ni lo será nunca. A diferencia de otros lugares aquí hay cultura.
