En el acto de forzar el lenguaje hacia un territorio atrabancado y rítmico, atropellado y locuaz, se halla el cariz más grato: un fondo musical que intensifica las honduras existenciales y literarias de Anónimo Hernández. Reseña de David Marín.
Una reseña a los Apuntes de un Escritor Malo por Anónimo Hernández, que ve su segunda edición en Ceibo Ediciones. De la pluma de Lizeth Tlatelpa de Román.