¿Qué es lo real y lo no real?

Por Mariluz Morales Gómez

Teatro de la gruta XV es un libro que viene a cuenta como un conjunto de diversas obras de la dramaturgia, demostrando la realidad del país en el que vivimos. Si bien sabemos que cada día nos sorprenden en todos los medios de comunicación con malas de noticias —algo que ya no sería de extrañarse— también nos hace pensar cómo con todo lo que ocurre, a veces nada nos aflige. ¿Acaso somos humanos?, ¿en dónde hemos estado todo este tiempo?

Algo que suelen decirnos los padres es que la televisión se queda corta frente a la vida real, pero entonces ¿qué hemos hecho para dejar de verla y crecer? El teatro también es una vía para hablar de temas como la delincuencia, la violencia, la falta de trabajo, el mexicano conformista. También es cierto que en el país tuvimos grandes luchas por la libertad, movimientos, donde adultos y jóvenes no se quedaron con los brazos cruzados.

La compilación que hace Teatro de la gruta XV, incluye temas como el miedo a la libre expresión, tan terriblemente de moda con el asesinato de periodistas en México. De este modo, el teatro aún mantiene el anhelo y la esperanza de trabajar con la verdadera realidad de México. Nadie puede tener la certeza de que una obra que hoy no parece pertinente, mañana cobrará un peso que no fue comprendido en su momento, y viceversa.

“La elección de estas obras se llevó a cabo de manera ciega, un dato curioso es que se construyó un mosaico representativo de la diversidad de voces, preocupaciones y estrategias expresivas en la dramaturgia emergente mexicana” dicen los editores de Teatro de la gruta XV.

Ejemplo de ello es la obra “De tripas corazón”, que resulta de manera unánime la obra más lograda y propositiva, la más redonda e interesante en la fragua de nuestra latente realidad. Los personajes están reunidos por la empatía, la coincidencia en una forma de ver el mundo cargada de humor negro, de renuncia a la sobre dramatización.

En un país atravesado por la sangre y la violencia, quienes han de lidiar con la muerte se acostumbran a ella, pero la poetizan otorgando lo que en vida parece cada vez menos posible: el respeto por los cuerpos. Nada en esta obra es forzado, fluye con una notable intuición. Sin ánimo didáctico, enseña cómo el Estado mexicano, sus instituciones y la sociedad misma se desdibujan, se disuelven en el sinsentido. Hoy en México, la farsa es el más vivo de los realismos.

La obra “1569” atrapa por la lucidez de las preguntas planteadas en un drama bien construido, con personajes trabajados con rigor, en el detalle de sus contrastes, con interesantes marcas de lenguaje, capaz de abrir un espacio para desarrollos físicos como el parkour. El tema es los usos de la memoria colectiva, los procesos de construcción y las consecuencias de las “verdades históricas”, que a la luz del rescate de un nuevo documento pueden perder vigencia y dar lugar a versiones nuevas, abrir el paso a la reconfiguración de la identidad de una cultura de un país.

Cada uno de los textos que se encuentra reunido en Teatro de la gruta XV es una pequeña forma de mostrar cómo el arte puede llamar la atención de la gente. Como decía, se incluye la obra “De tripas corazón” de Anaid Varela, ganadora del Premio Nacional de Dramaturgia Joven Gerardo Mancebo del Castillo 2015, puesta en escena que marcó un parte aguas en la dramaturgia mexicana.

Teatro de la gruta XV es una manera de dejarnos llevar al conocimiento de un secreto, una verdad, un evento que nos parecía oculto. Es un libro que sirve para conocer cómo es que el teatro es una gran forma de expresarnos, un arte —o tal vez un hobbie— pero una gran creación.