Por Gilberto González.
A veces suele aburrirnos la rutina de vivir, en esos momentos la mejor medicina puede ser mirar un partido de fútbol o escuchar un buen disco diría que también leer un libro; pero eso pasa por una extraña razón no precisamente se hace por aburrimiento, sino más bien para sobrevivir.
Los partidos de la liga mexicana no suelen quitarnos la monotonía al menos que se traté de nuestro equipo, la cosa es peor cuando éste juega de manera mediocre. En esas circunstancias me encontré este fin de semana y para empeorar esta situación mi mujer dejó cerrada su habitación para después.
Todo mal pero una canción llegó para aligerar mi fin de semana, me quedé sin palabras, es una rola que nos habla del amor al prójimo, llena de utopía y que me recordaron que a pesar de repetir sus paradigmas de composición, Serrat y Sabina, al final la poesía siempre triunfa.
Les dejo la rola para que la disfruten y sobre todo para que compren el disco, vale la pena.