Por Óscar Alarcón Travolta.
Mucho diseño, muchos colectivos, muchos panchos y ¿de música en Puebla cuándo?
Aquí hay una propuesta nueva, con talento y que mezcla varias disciplinas: la música, el diseño gráfico y la web. Así de frescos deberían ser los conceptos, además de sencillos y con estilo. Puro talento señores. Y sorprendentemente poblano, ¿ya ven que sí se puede?
La propuesta del Capitán Pepino (Edgar Echegaray o Goraki para los cuates) viene a darle auge al Indie, estilo en el que podemos clasificar la música del Golden Rainbow Kid. Aunque a decir verdad tiene influencias de todo tipo de músicos que van desde Frank Zappa hasta Beck, y no se cierra a las nuevas corrientes musicales ya que está siempre en la búsqueda de la experimentación. Ha tocado en distintas ciudades: Barcelona, Madrid, Cuernavaca, D. F., Monterrey y en su casa también.
El niño pepino de su carta astral
Amante del manga, del anime y del hentai, su trabajo puede adaptarse de buena manera a la lectura del comic japonés: mientras leemos las tiras podemos usar la música de Edgar como soundtrack. Si no tienen lana para comprar sus discos, pueden descargar algunas de sus rolas en el internet.
Y para que vean que no es de esos que se suben a berrear a los camiones y se dicen cantantes, el Goraki tiene varios discos en su haber, pero quiero destacar sus dos primeros trabajos (que son los discos que yo tengo) el Nebulosa Superfruit (2001) y Electro-cute (2004) ambos de disquera independiente e interactivos con la PC; pero además está incluido en otros dos discos Fancy Noise vol. 1 (Molécula Records 2005, distribuido en España) y Antojitos Mexicanos vol. 1 (Cremosonic 2005).
Yo les recomiendo que del disco Electro-cute escuchen el track 11 titulado Chicle de Menta, buenísimo.