Cuarenta y un grados centígrados marca el termómetro y me perfilo hacia un lugar que se ha convertido en un referente de la cultura y literatura en la UANL.
Daniel Herrera nos abofetea con este par de narraciones. Huevos calientes, nos demuestra que estamos ante un texto que nos provoca y nos sacude, que nos trastoca, elementos mínimos que debe contener el arte en pleno siglo XXI.