Un viaje a la capital del país para disfrutar de la exposición de 31 minutos en el Museo Franz Mayer: desde meses antes la alcancía inició su curso hacia el camino de la realización. Luna y Manu enfundados en el traje de la emoción recorren los pasillos, una y otra sorpresa los asalta: un guion del programa se adhiere a su sonrisa, caminan, los ojos se les abotagan de tanto no saber para donde mirar. Por Carlos Sánchez.