Por Claudio Willer | Traducción y notas por Leo Lobos
El episodio es relatado por Roberto Piva en el vídeo “Uma outra cidade”, de Ugo Giorgetti: el 26 de septiembre de 1966, cerca de la 16 horas, Piva y Roberto Bicelli caminaban por la Avenida Rio Branco en su trecho final, próximo al viaducto en São Paulo. Es cuando vieron pasar a toda velocidad un camión cargado de muebles y utensilios, coronados en su cima por un armario cuya puerta se abría y cerraba, batiendo con fuerza. Del mueble salía, flameando, conducido por el viento, una larga sabana blanca. Apuntando para el conjunto insólito, Bicelli exclamó: ¡Es el fantasma de André Breton! Ni Bicelli, al identificar de ese modo la mudanza con el surrealismo, ni Piva, recordándose en el minuto, de esta frase medio suelta en primer Manifiesto del Surrealismo, en un párrafo intitulado “Contra la muerte”: “No se olviden de formular adecuadamente vuestras disposiciones testamentarias: yo, por ejemplo, pido que me transporten al cementerio en un camión de mudanza”.
[Al día siguiente, leyeron en los periódicos la noticia del fallecimiento de Breton en aquella fecha y hora, a las 16 horas del 26 de septiembre de 1966. El azar objetivo así prestaba un oblicuo homenaje a su formulador].
Trecho extraído del ensayo “O Surrealismo” (Ed. Perspectiva). Lea más de los diversos relatos de sincronía, coincidencias significativas o acaso objetivo en: http://claudiowiller.wordpress.com/2012/05/25/acaso-objetivo/
“Me dicen que allí las playas son negras
por la lava llegada hasta el mar
y se extienden al pie de un inmenso pico
bajo un segundo sol de canarios silvestres”
-André Breton
Gracias, hermano, por la traducción de este trecho y que llegue a todas las esquinas. Así, dijo Bretón cuando estuvo en Canarias en los años 30. Precisamente también dijo que él no fue a llevar el surrealismo allí, sino que ya estaba. Lo mismo comentó en México.
Un gran abrazo para Óscar y Jorge.