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Por Giovanny Rubio

Ambato, Ecuador, 29 de enero de 2021 [01:58 GMT-5] (Neotraba)

De las pequeñas propiedades

En algún lugar me queda
un pedazo… de herencia de la tierra;
más el visado de mi cuenta
de hombre no me alcanza,
para atravesar las fronteras.
Estoy cansado de no ir
a ningún sitio,
de que mis pasos choquen
con mil muros…
de la torre de Babel que es mi alma…
…de las banderas.

En algún lugar me queda
un mendrugo de arena del planeta…
al que alguien ya le puso alambrado,
minas explosivas… blasón, nombre…
y un lúgubre letrero que me prohíbe el paso
…
A la cosecha…

El atardecer de mi cuerpo está plagado
de negras sementeras.
Me pertenece, tan solo el viento, la lluvia…
lo que me golpea.

Solo somos peregrinos
en el rosario enorme de los planetas,
la heredad nos es prestada
para disfrazarnos… en días de fiesta.

Mi país es un canto a la nostalgia

Equinoccial forma de vivirnos
hamacados en las aguas del pacífico,
atravesados por la línea media
que canta al sol en primavera…
Asfixiados entre dos hemisferios,
dos padres… dos dioses…
dos historias y un par
de canciones plañideras.

Mi país es un canto a la nostalgia,
con cuatro regiones que se unen
cuando el balón rueda
y se separan después del pitazo
de una cómica figura negra…
“¡Si se puede!” es el himno que humilla
hasta a La Marseillaise.
Mi país es una mano que estira Kigman
para pedir limosna en las iglesias
es Jota Jota enamorando a la guitarra
que esconde una canción morena.
Es el viento besando senos
blancos, nieves eternas…
Es Darwin preparando una teoría
contra la iglesia, al mirar una tortuga
solitaria… con nombre de gringo
y cara de vieja.

Mi país es un país de sapos,
que aplauden por igual
un dedo flaco, una espada,
un león hambriento… un loco cuerdo
o un milico sin gota de cerebro…
¡Mi país es mi país carajo!
Marchando en eterna cruzada
contra los recuerdos.

Simplemente humano

Metros de epidermis oscura
en que se tallan historias perversas,
agua de días colosales
esperando a que anochezcas…

…un par de mariposas tristes
siguiendo el ritmo del miedo
al verme al espejo en lunes…
¡Te siento!

Huesos triturados por la costumbre
de patear charcos de sangre,
me conducen inmisericordemente
en el trascendental viaje,
de volverme inmortal.
Innombrable.

Y las manos que buscan respuestas
en los costados de otra piel enferma;
Son mustias golondrinas ciegas…
…Con el calor de tu cuerpo
¡Sanguijuelas!


Huelo a suciedad y hastío.
Muero de tanto estar vivo…

Y aunque a veces extraño a los otros…
quiero ser uno con el universo,
buscar nuevamente la senda
que nos devuelva el cósmico reino…
alzo la mirada… vuelo en oraciones,
más lo sabes, lo sé, lo sabemos;
somos imagen de ellos…

Amor… suciedad y hastío.
Muero de tanto estar vivo…

Y el cielo se tapió con ladrillos

Los gusanos del tiempo
dejaron escapar su excreta
largas líneas de seda blanca…
Negra espera…

En un sabbath plagado de cáncer
los dioses despertaron del sueño,
estiraron sus entumidos huesos
por todo el firmamento;
agudizaron sus oídos leprosos
para escuchar plegarias… cantos.
Oraciones y salmos…

Y el silencio era el único grito,
que marcaba el compás de la
siniestra danza, corazón vacío.
Nula alabanza… Cero sonido.
…

Los hombres se tragaron
sus lenguas, para no participar
de las ofrendas…

… la hostia reposa en el arca,
el vino se pudre en el cáliz…
el viejo traje litúrgico
es polvo de nuevas larvas
nadie cree en lo eterno…
…las cruces revientan el frío.
El bronce grita demente:
–El cielo se tapió con ladrillos–

Humanos…
infinitamente humanos.
Renegamos del limbo y sus frutos
de las promesas de edenes de miel,
de ángeles que abrazan placeres
hombre-mujer…

Los hombres se tragaron sus lenguas
para renegar del cielo
y sus agravios…

Pater Noster

Padre del universo
Espíritu de perfección
Habitante del Reino de los Reinos.
Mostradnos tu morada eterna,
que tu pan calme el hambre,
tu sangre… la sed del espíritu,
aviva también
nuestro conocimiento.

¡Gracias por perdonarnos…!
… enséñanos a perdonar…
Aléjanos de toda tentación
y todo mal,

Padre, no te olvides de tus hijos
que perdieron el sendero,
muéstrales el camino
una, y otra vez.

¡Amén!

Giovanny Rubio. Foto cortesía del autor.

Giovanny Rubio (Ambato, Ecuador, 1968). Es director general
del Proyecto Internacional RUTA POÉTICA ECUADOR 2018 y 2019. Miembro de Casa de la Cultura Ecuatoriana Núcleo de Tungurahua 2013. Algunas de sus obras publicadas son: El Punto Muerto, Sin vela en este entierro, Káliz Eskarlatinta y Memorias del caos. Como escritor ha tenido los siguientes reconocimientos: 3er Lugar en el Primer Concurso Internacional de Poesía Luis Noboa Naranjo 2014, Mención de Honor en el Concurso Nacional de Poesía Juegos Florales XLI Fiesta de la Fruta y de las Flores 2012, Pluma de Oro de Montalvo. Ganador del Concurso Nacional de Cuento y Juegos Florales y del Concurso de Cuento Infantil Dir. Provincial de Educación Tungurahua, 1978.


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