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Por Mundo Nuestro

Puebla, México, 30 de enero de 2021 [00:01 GMT-5] (Mundo Nuestro)

La pandemia nos mantiene con los ojos abiertos. La ciudad se nos oculta en el encierro. Salimos a la calle buscando los tapabocas que alejan el riesgo que pueden cargar los otros. Buscamos en el aire toda posibilidad de riesgo, y perdemos así el instante. Dejamos de mirar a los ojos. No nos vemos. No nos escuchamos.

¿Qué hacer para recuperarnos de este exilio impuesto?

Detalle del mural en el Barrio de los Sapos. Foto cortesía de Mundo Nuestro.

Recuperar la ciudad que nos acoge, mirarla desde la mirada de nuestros ancestros. En las palabras con las que nombraron sus rincones. Imaginar a los niños que fueron. Así, recuperar la ciudad en el detalle del mural en una esquina del Barrio de los Sapos. Recordar que venimos de lejos.

Detalle del mural en el Barrio de los Sapos. Foto cortesía de Mundo Nuestro.

Recuperar el barrio. Ése es el intento que respalda el grupo Emprendedores del Barrio de los Sapos. Una idea de ello la encontramos en el parque que custodia La Casa del Mendrugo. Es la esquina de la 5 Oriente y la 4 Sur. Hace tiempo que la casona del siglo XVI, que llenaba el espacio, ha desaparecido.

Detalle del mural en el Barrio de los Sapos. Foto cortesía de Mundo Nuestro.

Muy pocos recuerdan que durante algún tiempo ahí existió una gasolinera. Finalmente, el parquecito es uno de los pocos que existen en el Centro Histórico, producto de un momento de lucidez que, de cuando en cuando, afloró en la historia moderna de nuestra ciudad.

Mural del Barrio de los Sapos. Foto cortesía de Mundo Nuestro.

Esta nota se publicó originalmente en Mundo Nuestro:

https://mundonuestro.mx/index.php/accion-civil/casadelmendrugo/item/2471-barrio-de-los-sapos

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